Cambio radical
¡Hola de nuevo!
No, no he cambiado yo, no os asustéis. El cambio radical del que hablo es el que le hice a mi habitación durante las vacaciones de semana santa. ¿Queréis saber más? Tengo un video en YouTube (https://www.youtube.com/watch?v=f956BkEBN8s) donde podéis ver el proceso, aunque aquí os explicaré todo más detalladamente.
Para empezar tengo que explicaros el por qué.
Bueno, la verdad es que cuando era más pequeña (9 o 10 años más o menos) cambié de habitación con mi hermana y hace medio año volvimos a cambiar las habitaciones. Tengo que aclarar que las habitaciones llevan igual desde que tengo memoria, nunca habíamos cambiado nada, como mucho añadir algunos posters o cuadros y cambiar juguetes por libros. Así que estaba muy harta de ver siempre lo mismo.
El armario que tenía era antiquísimo, tenía al menos 21 años. Así que imaginaros cómo estaba de estropeado. Mi sueño desde siempre ha sido tener un vestidor, ya sabéis que adoro la ropa, y hasta que eso suceda decidí quitar el armario y hacerme una especie de mini vestidor low cost. Para eso tuve que pasar mil penurias.
Mi idea principal era deja todo tal cual y sustituir el armario por una cómoda, dos barras sujetas a la pared para colgar ropa y una balda. Así que medí todo lo necesario y después estuve mirando en ikea presupuestos y muebles que se ajustaran a mis exigencias. Una vez elegido todo (lo más barato posible) me fui a ikea y compré los muebles.
Me tiré toda la mañana montando la cómoda y después, por la tarde, llegó Jesús para ayudarme a desmontar el armario. Cuando ya hubimos hecho todo eso, llegó la hora de poner las barras. ¿Qué pasó? Que la pared donde pensaba ponerlas estaba hueca y no podía colgar nada ahí. Había que buscar otra solución.
Fue entonces cuando se nos ocurrió la maravillosa idea (con toda la ironía el mundo) de mover la cama para ponerla en el lugar donde estaba el armario y hacer el vestidor en la pared donde estaba la cama. Pero no todo es tan fácil. La habitación es muy pequeña y la cama muy grande así que a la hora de girarla para cambiarla de pared, la cama no entraba, chocaba con el escritorio. Al final tuvimos que desmontar el lado de la cama que chocaba con el escritorio y, con todo el cuidado del mundo para que no se desmontara entera, la movimos.
Habiendo superado este obstáculo fuimos a hacer agujeros en la pared para poder poner las barras. Pero claro, nosotros no tenemos ni idea de agujerear paredes, poner tacos y colgar barras, así que salió fatal. La barra se caía y no había manera de que se sujetara y quedara bien.
El panorama era el siguiente: dos de las cuatro paredes tenían unos agujeros enormes y las dos barras que había comprado no me servían para nada. Además, la cama de mis padres estaba llena con toda mi ropa y los restos del armario estaban esparcidos por todo el salón y el pasillo. En resumen, un desastre.
Ya desesperada se me ocurrió la brillante idea de poner un burro para colgar mi ropa y el resto meterla en la cómoda. Así que eso hice. Cogí el coche y Jesús y yo nos fuimos hasta su casa para coger prestado uno de sus burros, fue mi salvación. Tomé prestado su burro hasta que por fin ayer fui a ikea y compré el mío propio.
Después, para tapar los agujeros, pinté con spray unos marcos viejos que tenía por casa y saqué un par de frases e ilustraciones bonitas y con una cosa de estas de colgar cuadros sin hacer agujeros puse los cuadros en la pared de tal manera que taparan los agujeros (y quedara bonito, claro está).
Finalmente todo quedó muy bonito. Aunque hubo muchísimas complicaciones.
*LINKS:
- Cómoda: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/40330517/
- Burro: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/50231630/
- Marco: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/50291780/#/00291768
- Perchas: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/70238541/
La moraleja que quiero que saquéis de esto es que ni el poco espacio que había ni las paredes defectuosas pudieron conmigo, al final conseguí cambiar la habitación, aunque no exactamente como yo quería, pero creo que ha quedado incluso mejor. Así que seguid mi ejemplo y si queréis algo id a por ello, aunque haya muchos obstáculos y sea difícil, nada es imposible si crees que puedes hacerlo.
Con esta historia también pretendía daros unos consejos si estáis pensado cambiar vuestras habitaciones:
Lo primero es que tengáis claro qué queréis y que busquéis inspiración, ya sea en revistas, en Internet, en la tele o donde sea.
Lo segundo es que midáis bien todo y que veáis que no tenéis ningún problema para poner lo que queréis donde lo queréis (yo tendría que haber mirado si la pared estaba hueca o no, aunque no se cómo porque el armario tapaba toda la pared).
Lo tercero es que establezcáis un presupuesto y comparéis precios.
Luego ya sólo os queda elegir los muebles, ir a la tienda y montarlo todo.
*NOTA: Yo tuve agujetas por al menos tres días, así que estad preparados para eso también.
Aquí os adjunto unas imágenes de cómo ha quedado mi habitación.
Espero que hayáis disfrutado mi historia y que os sirva si os encontráis en una situación parecida y también para motivaros a hacer todo lo que queráis. Os recuerdo que podéis seguirme en mis redes sociales: instagram https://www.instagram.com/brunette.alba/?hl=es, 21 buttons https://www.21buttons.com/brunette.alba y YouTube https://www.youtube.com/channel/UCDNkjCYkLUw0uYvSNsQbn1Q. ¡Hasta mañana!
No, no he cambiado yo, no os asustéis. El cambio radical del que hablo es el que le hice a mi habitación durante las vacaciones de semana santa. ¿Queréis saber más? Tengo un video en YouTube (https://www.youtube.com/watch?v=f956BkEBN8s) donde podéis ver el proceso, aunque aquí os explicaré todo más detalladamente.
Para empezar tengo que explicaros el por qué.
Bueno, la verdad es que cuando era más pequeña (9 o 10 años más o menos) cambié de habitación con mi hermana y hace medio año volvimos a cambiar las habitaciones. Tengo que aclarar que las habitaciones llevan igual desde que tengo memoria, nunca habíamos cambiado nada, como mucho añadir algunos posters o cuadros y cambiar juguetes por libros. Así que estaba muy harta de ver siempre lo mismo.
El armario que tenía era antiquísimo, tenía al menos 21 años. Así que imaginaros cómo estaba de estropeado. Mi sueño desde siempre ha sido tener un vestidor, ya sabéis que adoro la ropa, y hasta que eso suceda decidí quitar el armario y hacerme una especie de mini vestidor low cost. Para eso tuve que pasar mil penurias.
Mi idea principal era deja todo tal cual y sustituir el armario por una cómoda, dos barras sujetas a la pared para colgar ropa y una balda. Así que medí todo lo necesario y después estuve mirando en ikea presupuestos y muebles que se ajustaran a mis exigencias. Una vez elegido todo (lo más barato posible) me fui a ikea y compré los muebles.
Me tiré toda la mañana montando la cómoda y después, por la tarde, llegó Jesús para ayudarme a desmontar el armario. Cuando ya hubimos hecho todo eso, llegó la hora de poner las barras. ¿Qué pasó? Que la pared donde pensaba ponerlas estaba hueca y no podía colgar nada ahí. Había que buscar otra solución.
Fue entonces cuando se nos ocurrió la maravillosa idea (con toda la ironía el mundo) de mover la cama para ponerla en el lugar donde estaba el armario y hacer el vestidor en la pared donde estaba la cama. Pero no todo es tan fácil. La habitación es muy pequeña y la cama muy grande así que a la hora de girarla para cambiarla de pared, la cama no entraba, chocaba con el escritorio. Al final tuvimos que desmontar el lado de la cama que chocaba con el escritorio y, con todo el cuidado del mundo para que no se desmontara entera, la movimos.
Habiendo superado este obstáculo fuimos a hacer agujeros en la pared para poder poner las barras. Pero claro, nosotros no tenemos ni idea de agujerear paredes, poner tacos y colgar barras, así que salió fatal. La barra se caía y no había manera de que se sujetara y quedara bien.
El panorama era el siguiente: dos de las cuatro paredes tenían unos agujeros enormes y las dos barras que había comprado no me servían para nada. Además, la cama de mis padres estaba llena con toda mi ropa y los restos del armario estaban esparcidos por todo el salón y el pasillo. En resumen, un desastre.
Ya desesperada se me ocurrió la brillante idea de poner un burro para colgar mi ropa y el resto meterla en la cómoda. Así que eso hice. Cogí el coche y Jesús y yo nos fuimos hasta su casa para coger prestado uno de sus burros, fue mi salvación. Tomé prestado su burro hasta que por fin ayer fui a ikea y compré el mío propio.
Después, para tapar los agujeros, pinté con spray unos marcos viejos que tenía por casa y saqué un par de frases e ilustraciones bonitas y con una cosa de estas de colgar cuadros sin hacer agujeros puse los cuadros en la pared de tal manera que taparan los agujeros (y quedara bonito, claro está).
Finalmente todo quedó muy bonito. Aunque hubo muchísimas complicaciones.
*LINKS:
- Cómoda: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/40330517/
- Burro: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/50231630/
- Marco: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/50291780/#/00291768
- Perchas: http://www.ikea.com/es/es/catalog/products/70238541/
La moraleja que quiero que saquéis de esto es que ni el poco espacio que había ni las paredes defectuosas pudieron conmigo, al final conseguí cambiar la habitación, aunque no exactamente como yo quería, pero creo que ha quedado incluso mejor. Así que seguid mi ejemplo y si queréis algo id a por ello, aunque haya muchos obstáculos y sea difícil, nada es imposible si crees que puedes hacerlo.
Con esta historia también pretendía daros unos consejos si estáis pensado cambiar vuestras habitaciones:
Lo primero es que tengáis claro qué queréis y que busquéis inspiración, ya sea en revistas, en Internet, en la tele o donde sea.
Lo segundo es que midáis bien todo y que veáis que no tenéis ningún problema para poner lo que queréis donde lo queréis (yo tendría que haber mirado si la pared estaba hueca o no, aunque no se cómo porque el armario tapaba toda la pared).
Lo tercero es que establezcáis un presupuesto y comparéis precios.
Luego ya sólo os queda elegir los muebles, ir a la tienda y montarlo todo.
*NOTA: Yo tuve agujetas por al menos tres días, así que estad preparados para eso también.
Aquí os adjunto unas imágenes de cómo ha quedado mi habitación.
Espero que hayáis disfrutado mi historia y que os sirva si os encontráis en una situación parecida y también para motivaros a hacer todo lo que queráis. Os recuerdo que podéis seguirme en mis redes sociales: instagram https://www.instagram.com/brunette.alba/?hl=es, 21 buttons https://www.21buttons.com/brunette.alba y YouTube https://www.youtube.com/channel/UCDNkjCYkLUw0uYvSNsQbn1Q. ¡Hasta mañana!
BESIS DE FRESI!!
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